► No raspe la escarcha y el hielo con objetos afilados. No utilice
aerosoles, calentadores eléctricos como secadores de pelo,
limpiadores a vapor u otras fuentes de calor para evitar dañar las
piezas de plástico.
► ADVERTENCIA: No utilice dispositivos mecánicos ni otros
equipos para acelerar el proceso de descongelación, salvo
aquellos recomendados por el fabricante.
► Si el cable de alimentación está dañado, debe ser sustituido por
el fabricante, por su servicio técnico o por cualquier profesional
cualificado similar para evitar riesgos.
► No intente reparar, desmontar o modificar este electrodoméstico
por su cuenta. En caso de reparación, póngase en contacto con
nuestro servicio de atención al cliente.
► Si las luces están dañadas, deben ser sustituidas por el fabricante,
por su servicio técnico o por cualquier profesional cualificado
similar para evitar riesgos.
► Quite el polvo de la parte posterior de la unidad al menos una vez
al año para evitar el riesgo de incendio, así como un mayor
consumo de energía.
► No rocíe ni pulverice el electrodoméstico durante la limpieza.
► No use agua pulverizada o vapor para limpiar el electrodoméstico.
► No limpie los estantes o la puerta de cristal fríos con agua
caliente. Un cambio repentino de temperatura puede hacer que
el cristal se rompa.
► Si deja el electrodoméstico fuera de uso durante un periodo
prolongado, déjelo abierto para evitar que se acumulen malos
olores en el interior.