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Precauciones que deben seguirse 
para la refrigeración de alimentos
Antes de introducir comida caliente en el frigoríco, 
debe enfriarla a temperatura ambiente.
Cuando coloque los productos en el frigoríco 
deben estar limpios y secos.
Los envases de alimentos deben estar bien 
cerrados antes de introducirlos en el frigoríco, de 
forma que el agua de éstos no se evapore. De esta 
forma también se mantienen frescas las frutas y 
verduras y se evita que la comida absorba otros 
olores.
La comida debe guardarse de forma ordenada.
Clasique los alimentos de acuerdo con el uso 
que haga de ellos. La comida de uso diario deberá 
colocarse en la parte delantera de la estantería para 
poder encontrarla con facilidad y no tener la puerta 
abierta durante mucho tiempo. Además evitará que 
los alimentos se arrinconen en el fondo y caduquen.
No llene demasiado el frigoríco con comida, separe 
los productos de forma conveniente y deje espacio 
entre ellos para que circule el aire frío. De esta 
manera, se consigue una refrigeración óptima.
La comida no debe quedar demasiado cerca de la 
pared interior. Los alimentos con gran contenido 
de humedad no deben colocarse demasiado cerca 
de la pared interior del frigoríco para que no se 
congelen; por lo tanto, mantenga cierta distancia a 
la pared cuando introduzca comida en esa zona.
Cuando manipule comida del compartimento para lácteos, abra y cierre este compartimento como se 
muestra a continuación para evitar que se atasque la mano.
 
Precaución
Si los alimentos del frigoríco están en contacto directo con el material del 
revestimiento durante un largo periodo de tiempo, en especial la comida 
grasa, producen corrosión en dicho revestimiento. Evite en la medida 
de lo posible el contacto directo entre la comida y el revestimiento. Si el 
revestimiento se mancha de aceite, límpielo de inmediato.